En medio del bullicio de nuestras vidas modernas, muchas veces nos olvidamos de algo esencial: reconectar con nosotros mismos. ¿Cuántas veces has sentido que cargas más que solo responsabilidades? Hay momentos en los que el cuerpo pesa, la mente se agota y el corazón parece estar a medio latir. Es ahí donde el Reiki aparece como un susurro suave, una invitación a regresar a tu centro.
Reiki, una palabra que proviene del japonés, se traduce como «energía vital universal». Es una práctica ancestral que canaliza esta energía a través de las manos, con el propósito de equilibrar, sanar y nutrir nuestro ser en todos los niveles: físico, emocional, mental y espiritual. No se trata de magia ni de
